Territorios de la cura

La convocatoria a este número 32: Nuevos territorios de la cura, nos invita a pensar en prácticas extraterritoriales, entendiendo con esta idea a la intervención psicoanalítica fuera de los consultorios, a las acciones comunitarias con poblaciones vulnerables, a intervenciones en los campos de la cultura, la educación, la justicia, la medicina y las ciencias en general.
Muchas de las nuevas prácticas, que hoy alcanzan acciones que no tienen experiencia ni saber previo que las sostengan, se realizan con éxito gracias a la participación activa y esforzada de muchos analistas sobre todo de aquellos en formación en el Instituto de APA.
Practicar nuevos lazos en nuevos territorios, supone una pérdida de habitualidad, familiaridad, confortabilidad y principalmente reconocer un no saber, lo cual suele resultar muy duro para las concepciones cerradas.
A mi entender, las salidas a lo comunitario, paradojalmente no nos es común y por ello generan expectativas y disensos.
Con la pandemia los analistas se vieron en la necesidad de renovar el concepto de “presencia” la cual ya ha dejado de ser presencialidad para transformarse en “estar con el otro” en la medida de lo posible.
La falsa dicotomía entre presencialidad y virtualidad intenta ocultar las modificaciones que la nueva era ofrece. La pantalla ya es un nuevo territorio de transmisión y asistencia psicoanalíticas.
Otro aspecto no menos importante es la incidencia de los nuevos territorios científicos y tecnológicos que modifican aspectos importantes de la cultura. Hoy ya resulta inimaginable un mundo sin aparatos inteligentes. Estos aparatos que brindan comodidad y confort, a la vez son disruptivos en relación a los hábitos y costumbres. Manejar la inteligencia artificial de los mismos, requiere de la inteligencia propia del sujeto y pone en juego sus determinantes inconscientes, por lo cual alguien puede volverse torpe o inhibir alguna función motora. Por lo tanto, hay nuevos síntomas que ligan la angustia y la incertidumbre.
Un tercer aspecto no menor para los psicoanalistas, son las intervenciones, cada vez más frecuentes, en territorios interdisciplinarios que destacamos en nuestra sección: Intersecciones.
En síntesis, los analistas estamos hoy instalados en el mundo, principalmente fuera del bienestar del consultorio. Esta apertura tiene influencia en la formación y ésta debe acompañar los nuevos procesos.
El Discurso del analista se entrecruza con el Psicoanálisis circulante en la polis, es decir la episteme psicoanalítica, luego hay encuentro y desencuentros entre discurso y episteme. Estos territorios no siempre pueden acordar pues el Discurso del Analista se ajusta a la regla fundamental mientras la episteme a las regulaciones sociales del derecho y las ciencias.
Quiero destacar la vigencia y la pertinencia de las publicaciones digitales, libros y revistas, que también representan nuevos territorios de escritura necesarios en un mundo en el cual para obtener papel implica talar muchos árboles y destruir el planeta. Considero necesario adaptarnos a este territorio de escritura y publicación.
En síntesis, permanentemente enfrentamos nuevos desafíos y poder elaborarlos y administrarlos constituye el logro de asimilar nuevos territorios.

Autora:

Mirta Goldstein (APA)