Avatares De La Técnica Psicoanalítica En Tiempos De Pandemia Temporalidad Y Realidad Psíquica
Lo que trata Marc Augé en su obra “¿Qué pasó con la confianza en el futuro?” (2008) es cómo se determinan los períodos que conforman la historia de acuerdo con la ideología y el poder. ¿Tendremos que agregar los determinantes biológicos?
Esto lo podemos preguntar en estos tiempos de pandemia que vivimos durante 2020 y 2021 sin saber cuándo terminará. Sí podemos hablar de un presente donde la tecnología permite que permanezcamos unidos al mismo tiempo que la exigencia de la no presencia nos separa.
Explorar qué pasó en el año 2020 transcurrido entre miedo, negación, muerte y esperanzas, nos permite tomar en consideración una frase de este mismo autor Marc Augé: “El porvenir es menos previsible que antes” agregaríamos porque ya está aquí.
En mayo de 2015, la periodista Luisa Corradini lo entrevistó invitándonos a reflexionar sobre el futuro.
Lejos estábamos de imaginar lo que asolaría al mundo durante 2020 hasta nuestros días y sin saber hasta cuándo.
Podemos decir que esta pandemia ha abatido nuestro presente desmantelando de proyectos el futuro, a semejanza de lo ocurrido durante las dos grandes guerras que asolaron a varias naciones, pero no al mundo entero simultáneamente. En este caso se hace indispensable sostener la esperanza no sólo en los científicos sino en las políticas gubernamentales y en las economías de los laboratorios.
En 2008 se publicó en Francia la mencionada obra donde premonitoriamente el antropólogo francés, autor de “Los no lugares”, “analiza con precisión las múltiples dimensiones de la globalización, sobre todo sus aspectos políticos, científicos y simbólicos.”
Es nuestro parecer que la temporalidad es y ha sido un problema para la humanidad que ha intentado abordarlo desde diferentes puntos de partida: científicos, filosóficos, sociales, económicos y políticos.
La virtualidad (como lo no real) que inevitablemente nos ha inundado es lo que ha permitido continuar con nuestro quehacer psicoanalítico en forma no presencial en numerosos casos. Similar al “home office”, nos preserva y al mismo tiempo ofrece ventajas y desventajas.
Para nosotros psicoanalistas, nos ha permitido investigar y proponer variaciones en la técnica, que han permitido continuar tratamientos, innovando como dije la técnica, pero intentando conservar aspectos posibles del método.
El tema surge de las preocupaciones de casi todos los psicoterapeutas comprometidos con el campo de nuestra práctica.
El terreno que nos ofrece la particular situación que vivimos (la pandemia) para investigar en nuestro quehacer psicoanalítico, tanto en la práctica como en las supervisiones, es enorme.
Podemos examinar y reconocer los efectos del uso de no tocarnos, no abrazos ni besos, sobretodo en el análisis de niños. La posibilidad de dejar librado a la elección y/o posibilidad del paciente el lugar donde permanecerá durante la sesión. Por ejemplo, un paciente me decía: “Me gusta mucho estar en mi cuarto tirado en la cama durante la sesión.”
Es decir, la posibilidad que el paciente nos transmita sus fantasías en el terreno transferencial – contratransferencial que se ha creado aún con la distancia.
Le contesté “Yo estoy en el mismo lugar de siempre, mi consultorio, donde nos encontrábamos presencialmente.” Se ríe y me dice “Ya sé, usted me dice que seguimos siendo paciente y analista ¿no? Le contesto “¿Y por qué tengo que aclararlo?” Se queda en silencio y me dice: “Siempre le cuento que me gusta cuando mi novia se queda en casa”. Yo agrego: “Y se queda a dormir en tu cuarto”.
No sorprende que yo haya recordado las escenas que este paciente me relató de colecho con su mamá cuando su papá se iba a trabajar.
S. Lorand expresa que “El pensamiento científico en sí mismo no se separa claramente del reino de lo inconsciente y el psicoanálisis de los inventores e investigadores muestra que existe una conexión íntima entre las actividades mentales superiores por un lado y los deseos y anhelos inconscientes y sus raíces infantiles por el otro.”
Todo lo expresado es muy útil considerando también a la supervisión un espacio de investigación de estas nuevas modalidades en la práctica psicoanalítica.
Tanto en el “aquí y ahora” con el paciente cómo en el momento de la supervisión, está presente aquello que denominamos imaginación.
En su acepción más simple “imaginación” denota un acto mental que tiende a reemplazar con una imagen, palabra, concepto o construcción, algo que es pensado como existente pero que no puede ser percibido sensorialmente al mismo tiempo. Es un proceso más complejo y más extenso en el tiempo que la formación de imágenes (figurabilidad).
Dice Ernst Kris: “En la función de la comunicación, la imagen ocupa su lugar junto al gesto y la palabra, pero se distingue por un rasgo particular: no presupone la presencia de la persona a quién está destinada. Los gestos deben ser vistos cuando son realizados, las palabras deben ser escuchadas cuando se las pronuncia. Las imágenes pueden ser contempladas en una ocasión posterior.”
El psicoanálisis por teléfono, o por video llamada o por Zoom nos enfrenta a la consideración del espacio – tiempo de una manera singular. En el transcurrir de nuestras experiencias podremos intentar darles sentido a las necesidades por venir.
Tenemos que preguntarnos cómo son las representaciones colectivas del porvenir. Para ello reconocer cuando la ficción reemplaza la realidad por lo cual tenemos muy en cuenta en estas circunstancias las funciones del Yo. Esto hace que muchas veces durante el proceso analítico transitemos por el preconsciente sabiendo que la realidad fáctica (la de los hechos) nos engloba a ambos, analista y analizando y en estas circunstancias el tema Covid está presente en el discurso con mucha frecuencia. No por esto la escucha dejará de estar atenta a la cadena de significantes, asociaciones del paciente, sabiendo que la realidad psíquica y la subjetividad están siempre presentes.
El tema del tiempo aparece con mucha frecuencia a través de la edad cronológica del paciente.
Marc Augé mencionó una comparación que me pareció muy interesante. Dijo sentirse como un hombre sin edad como los “viejos armañacs”. En ese momento tenía 80 años.
¿Qué es armañac? resumidamente: el vino obtenido de dos cepas de uvas se destila una sola vez, en una simple forma de columnas. El licor que se obtiene se envejece en barricas de roble francés y se mezcla con licores jóvenes. Es decir, un armañac sin edad es una mezcla de diversos armañacs de edades diferentes.
Los pacientes añosos en estas circunstancias de peligro y muerte frecuentemente evocan tiempos distintos, pasados diversos. Es interesante que puedan “jugar” con sus recuerdos sintiéndose al mismo tiempo en la realidad del presente. Esto no impide pensar en el porvenir.
Si pensamos que la identidad se alimenta de la alteridad, entonces el aislamiento, la falta de contacto son situaciones que enfrentaremos en el transcurrir de un proceso buscando según cada caso no sólo con interpretaciones sino con diferentes maneras de acercarnos, dadas las ventajas que nos ofrece la tecnología.
Bibliografía
Augé, M: (2008), Qué pasó con la confianza en el futuro”. Siglo XXI
Botella, C. & S. (1998). Biblioteca Nueva, APM De lo perceptivo a la causalidad psíquica. [Sobre el proceso analítico: Libro Anual de Psicoanálisis 1] – Revué Française de Psychoanalyse. Madrid, España.
Green, A. (2001). Repensar el encuadre. Zona Erógena, 48.
- (2007). Jugar con Winnicott. Buenos Aires: Argentina: Amorrortu
Resnik, S. (2014). La escucha en todos los sentidos. Revista de Psicoanálisis, LXXI, 1.
Socci, A. (1991). Investigación y proceso analítico. Acerca de la noción espacio-temporal en el aparato psíquico. Revista de Psicoanálisis, 48, 56, 1.045-1.059.
- (2003). Psicoanálisis en las fronteras: “Entre la realidad externa y las realidades psíquicas: El encuadre hoy”. Revista de Psicoanálisis, 60, 04, 1189-1199.
Autor:
Amalia Socci
Descriptores: FANTASIA INCONSCIENTE / TRANSFERENCIA / LO VIRTUAL
Directora: Mirta Goldstein de Vainstoc
Secretario: Jorge Catelli
Colaboradores: Claudia Amburgo
José Fischbein
María Amado de Zaffore
Los descriptores han sido adjudicados mediante el uso del Tesauro de Psicoanálisis de la Asociación Psicoanalítica Argentina
Presidenta: Dra. María Gabriela Goldstein
Vice-Presidente: Dr. Rafael Eduardo Safdie
Secretario: Dr. Adolfo Benjamín
Secretaria Científica: Lic. Cristina Rosas de Salas
Tesorero: Dr. S. Guillermo Bruschtein
Vocales: Dr. Carlos Federico Weisse, Dra. Leonor Marta Valenti de Greif, Lic. Mario Cóccaro, Dr. Néstor Alberto Barbon, Psic. Patricia Latosinski, Lic. Roxana Meygide de Schargorodsky, Lic. Susana Stella Gorris.